Podemos ser Inmortales.
“ Los hombres viven obsesionados por la inmensidad de lo eterno. Por eso nos preguntamos: ¿tendrán eco nuestros actos con el devenir de los siglos?, ¿recordarán nuestro nombre los que no nos conocieron cuando ya no estemos?, ¿se preguntarán quiénes éramos, la valentía que demostramos en la batalla o lo apasionados que fuimos en el amor? ”. Así hablaba Ulises uno de los héroes de la Ilíada de Homero, y así lo recogió Wolfgang Petersen, director y guionista alemán en la película Troya. Y estoy de acuerdo con aquello que decía Ulises y que de manera magistral acopió Homero en su obra inmortal. Los hombres desde tiempos inmemoriales han estado obsesionados con la inmortalidad. De que sus nombres no sean olvidados y que a través del discurrir del tiempo su legado no perezca. En principio parecería que hay algo malo en esta actitud. Un poco de vanidad tal vez. Pero, creo que sería un tanto mezquino interpretar esta pretensión de tributo como simple jactancia. Entiendo más bien, qu